El panel reunió a Felipe González San Martín, director de Regulación y Asuntos Públicos de Claro Chile; Herbert Galiano, representante regional de Randy Labs y especialista en inteligencia aplicada al combate de la piratería; Karina González Duarte, gerenta legal de DIRECTV Latin America; y Ximena Rojas Prosser, abogada, académica y ejecutiva del sector fintech, quien ofició como moderadora.
Un diagnóstico contundente: la piratería alcanzó niveles “nunca vistos” en América Latina
La mesa contra la piratería del Chile Media Show 2025 dejó un mensaje inequívoco: la piratería audiovisual se ha convertido en un fenómeno de escala industrial, altamente sofisticado y con un impacto directo en la seguridad, la economía digital y la sustentabilidad del ecosistema audiovisual y deportivo en la región.
Ximena Rojas abrió el panel destacando que el crecimiento del delito avanza “al mismo ritmo que las tecnologías”, lo que obliga a que la academia, el sector público y privado y la sociedad civil “puedan juntos luchar contra este fenómeno que cada día ha ido avanzando con mayor rapidez”.
Herbert Galiano trazó un panorama alarmante: “La piratería nunca alcanzó niveles tan altos en nuestra región”. Según explicó, en eventos deportivos “de cada 10 hinchas, 7 u 8 lo están viendo en plataformas ilegales”, impulsados por conexiones de fibra óptica, acceso libre a buscadores y la venta masiva de TV Box “a menos de 15 dólares”.
Además, alertó sobre la transformación del delito: “La piratería hoy en día trasciende fronteras. No sabemos ni siquiera quién es el pirata”. Agregó que estas plataformas utilizan “tecnología de clase mundial”, desde servidores en nubes globales hasta sistemas de atención al cliente que las hacen parecer servicios completamente legales. “Estamos enfrentando un enemigo realmente poderoso”, enfatizó.
Pérdidas millonarias, impacto transversal y riesgo para el empleo
Consultada por el impacto económico, Karina González fue categórica: “Estamos hablando de pérdidas millonarias”. Recordó que la piratería ya opera como una industria organizada: “En Argentina se encontró un operativo con área de finanzas, TI… organizaciones con nivel empresarial”.
Según cifras del último estudio de la Alianza contra la Piratería, en Chile 2 millones de los 4,5 millones de usuarios de banda ancha consumen contenido ilegal, lo que implica un 45% del mercado y pérdidas aproximadas de 337 millones de dólares anuales, además de “la afectación de 20.000 empleos”.
La ejecutiva subrayó que el daño es transversal: “Esto no es un tema que afecte a unos pocos, afecta a distribuidores, programadores y también a los consumidores, que muchas veces no toman conciencia del riesgo”.
Más allá del contenido: los riesgos reales para los usuarios
Felipe González llamó a mirar un aspecto crítico muchas veces invisibilizado: la vulnerabilidad del usuario.
Explicó que instalar aplicaciones piratas “es regalarle sus datos personales a organizaciones criminales”, incluyendo contactos, micrófono, cookies y “datos de sus cuentas bancarias”. Advirtió que esta información “termina traficándose en el mercado negro”.
El riesgo se potencia por la presencia de malware, ransomware y adware invasivo. “Todo por ver una película… muchas veces grabada en el cine”, ironizó.
El abogado subrayó el rol clave que deben asumir los reguladores: “La autoridad debe intervenir de forma activa. Subtel, la agencia de ciberseguridad y la futura agencia de protección de datos tienen facultades para coordinar acciones efectivas y rápidas”.
El fútbol, epicentro del negocio pirata
Consultada sobre los contenidos más afectados, Karina González confirmó que “sí, es el fútbol”.
Explicó que la masividad del contenido deportivo y la necesidad de actuar en tiempo real vuelve al deporte un blanco prioritario: “Si no llegaste antes de que partiera la transmisión, lo que puedas hacer después poco sirve”.
Destacó además un hito reciente: la Conmebol se integró en octubre a la Alianza contra la Piratería, una señal clara del nivel de preocupación continental.
Educación al consumidor y nuevas tecnologías: lecciones desde Europa
La dimensión cultural fue otro de los ejes del panel. Galiano sostuvo que los usuarios deben entender el impacto de sus decisiones: “Nadie se hace cargo de enseñarles el daño que produce contratar una plataforma ilegal”.
Presentó además las experiencias más avanzadas de Europa para combatir la retransmisión ilegal de eventos deportivos, basadas en inteligencia artificial. “Ya existe tecnología para detectar miles de IPs piratas durante los 90 minutos de un partido”, explicó. En España y Portugal, agentes automatizados de IA “identifican entre 2.500 y 3.000 IPs” en tiempo real y las envían a los ISPs para bloqueo inmediato.
Incluso alertó sobre hallazgos recientes: “Google reconoció que había 10 millones de cajitas actuando como zombis, simulando clics para monetizar publicidad. Ojalá empiece la reflexión para que nunca más Google permita que aparezcan sitios como Fútbol Libre o Tarjeta Roja”.
Un cierre con pedidos urgentes: acción, regulación activa y educación
En las reflexiones finales, Karina González pidió “acciones concretas” y avanzar de manera decidida: “No basta con firmar convenios o declaraciones. Necesitamos conciencia, cultura y educación. No puede ser que hoy alguien crea que Magistv es legal”.
Felipe González reforzó la necesidad de que la autoridad asuma un rol activo: “No se puede dejar todo en manos de la industria. Se requiere coordinación, campañas de concientización y un mensaje claro: bajar un aplicativo pirata es como invitar a un ladrón a su casa”.
Galiano, por su parte, cerró con un ejemplo concreto del nivel de amenaza: “Algunas cajitas se usan como zombis para atacar grandes plataformas, incluso Google. Estamos hablando de millones de dispositivos”.
Finalmente, Rojas destacó el sentido del panel: “Colaborar, sí, pero colaborar para transformar. Dejar de mirarnos con desconfianza. A todos nos interesa parar la piratería”.
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29.11.25 13:37
